Tomado de diario La Hora: martes 16 de diciembre 2014.
“Pretender sacarles de su casa propia es una persecución directa a los pueblos”.
Nina Pacari
Dirigente indígena
“Ojalá en AP podamos construir una metodología de diálogo que permita acordar agenda y encontrar mecanismos para tratar desacuerdos”.
Virgilio Hernández
Asambleísta de PAIS
La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) no solo que no saldrá del edificio que el Ministerio de Bienestar Social (actual Ministerio de Inclusión Económica y Social-MIES) le otorgó en comodato el primero de julio de 1991 y que ahora tiene que ser devuelto por resolución ministerial, sino que exige que se le entregue el título de propiedad del inmueble.
“(El edificio) ha sido el símbolo de las construcciones de los pueblos, de la relación del Estado con los indígenas”, puntualizó Jorge Herrera, presidente de la Conaie, quien está seguro de que la resolución del Ministerio responde a “una persecución a los procesos de lucha del movimiento indígena”.
La edificación de tres pisos, en el norte de Quito, se convirtió no solo en la sede de la Conaie, sino en la ‘casa’ de los indígenas, que fue entregada “como parte de un proceso de resarcimiento histórico”, según Nina Pacari, dirigente indígena.
Para ella, el convenio, que fue firmado por el fallecido exministro de Bienestar Social Raúl Baca Carbo y el expresidente de la Conaie Luis Macas no se limita a la “suscripción de un convenio jurídico, sino a un reconocimiento de los derechos”.
Por eso, realizarán una asamblea nacional para definir acciones. Ellos esperan que no se produzca un desalojo.
Importancia histórica
En el edificio, que fue construido y adecuado por los indígenas en varias mingas, se han producido hechos que han marcado su lucha durante más de dos décadas, sin contar la entrega durante el gobierno de Rodrigo Borja, después de días de huelga.
En 1992 fue la sede de la campaña continental de los 500 años de la resistencia indígena y en 1995 fue el lugar donde se acordó la creación del movimiento Pachakutik.
Allí también se organizó el levantamiento del agua, la tierra y la vida, en 1993. Además, fue el centro donde los indígenas resolvieron apoyar y quitar el respaldo a los presidentes, incluido Rafael Correa. Se planificaron las acciones en contra de los gobiernos de Jamil Mahuad, Abdalá Bucaram y Lucio Gutiérrez
Posiciones
La crítica a la decisión del MIES para la creación de un centro de acogida no se dio solamente desde el movimiento indígena. El asambleísta Virgilio Hernández (PAIS), en su cuenta de Twitter, lamentó la decisión del Ministerio.
El legislador publicó que no comparte la decisión y que cree que “AP (Alianza PAIS) es quien más pierde”. “La decisión del comodato expresa desacuerdos más profundos. Conaie no es homogénea, tiene diversas tendencias”, indicó.
Hernández, quien participó en la lucha del movimiento indígena junto a Pachakutik, cree que “aún en este momento es posible un diálogo que parta de mutuos reconocimientos”.
Añadió que espera que “sectores progresistas de la Conaie reconozcan que gran parte de los cambios eran demandas históricas de la sociedad y el Ecuador” y que “ojalá en AP podamos construir una metodología de diálogo que permita acordar agenda y encontrar mecanismos para tratar desacuerdos”.
El sociólogo brasileño Boaventura de Sousa Santos, en una carta abierta al presidente de la República, Rafael Correa, manifestó que “sin importar las justificaciones legales, expulsar a la Conaie de su edificio es un acto injusto y políticamente insensato”.
Mientras que el legislador Miguel Carvajal (PAIS), también en Twitter, dijo que espera que la decisión del MIES sobre la casa de la Conaie “se pueda modificar”. (AGO)
15
días dio el Ministerio para que la Conaie deje su sede.
3
pisos tiene el edificio.